Hace poco tuve la oportunidad de visitar Chiapas y la verdad es que quedé encantada pues hay demasiado por conocer desde las ciudades, poblados, su gastronomía, cultura, zonas arqueológicas, sitios naturales y más. Una semana no basta para conocer todo lo que guarda entre sus enormes y verdosas montañas como si sus picos estuvieran acariciando el cielo, diría que aquí es “Donde dios se inspiró por completo dejando un escenario único en el mundo”.
De todos los lugares que posee Chiapas, hay unos que por nada del mundo se nos podrían escapar para visitar ¿Por qué? Porque simplemente son extraordinarios, con una belleza que enamora y llena tus pupilas de las más pura naturaleza, además porque al disfrutar de estos escenarios hacen que te olvides de todo. ¡Sí, de todo!
Así que aquí te presento 9 Paraísos Naturales que tienes que Conocer al ir a Chiapas, seguro te enamorarás como yo:
1. El Cañón del Sumidero
Siempre había querido conocer el Cañón del Sumidero y ahora que tuve la oportunidad de visitarlo podría decir que su belleza y estar ahí es más de lo que imaginé. Para recorrerlo se hace por medio de un recorrido en lancha que lo tomamos en el embarcadero Cahuaré que está en Chiapa de Corzo un Pueblo Mágico, desde aquí con ayuda de un guía iniciamos la gran travesía pero mientras nos adentrábamos más y más podía ver como las paredes del cañón iban creciendo hasta llegar a una altura impresionante a más de mil metros, entre estas paredes se formaban algunas cuevas, figuras como un caballito de mar y un cristo en la cruz, claro que se tenía que usar un poco la imaginación para apreciarlo como tal.
“Embarcadero Cahuare”
“Paredes del Cañón del Sumidero: cascadas, cuevas, cristo en la cruz, caballito del mar”
Siguiendo el recorrido pudimos ver algunos cocodrilos en su pleno hábitat y diferentes especies de aves; otra de las cosas que admiré del Cañón del Sumidero fueron las cascadas que se ven al paso pero de todas hay una que me cautivo por su belleza, la forma que tiene y la manera de cómo va cayendo el agua, ésta fue la Cascada Árbol de Navidad literal parecido a un árbol de navidad solo que gigante y como si en la punta del árbol estuviera cayendo nieve, se ve así por el color blanco que toma el agua mientras baja con fuerza.
“Cascadas: Hilo de Plata y Árbol de Navidad”
“Cocodrilos y aves exóticas en el Cañón de Sumidero”
Haciendo una breve pausa, hay algo que durante el recorrido no me gusto y más que desagrado fue una enorme tristeza e impotencia para mi pues en una parte del río nos encontramos con una zona donde se concentraba toda la basura que este arrastraba a su paso, y aunque había gente trabajando por la limpieza del agua, si causa esa decepción ver como contaminamos zonas naturales, quizá la mayoría te pinte y hable bonito pero la realidad es que también te puedes encontrar con este problema. No está por demás mencionar que debemos tener cuidado en donde tiramos la basura y respeto por la naturaleza.
“Contaminación en una parte del Cañón del Sumidero”
Finalmente y después de 42km de recorrido llegamos donde el Parque Nacional Cañón del Sumidero termina pero solo siendo como parte del parque ya que después viene la presa hidroeléctrica y continuación del río Grijalva, si hay algo que recompenso el fin de este recorrido es la vista que se obtiene ya que estaba rodeado de puras montañas, un lago enorme con más de 245mts de profundidad y el paso del río, estar en medio y rodeada de todo esto me hizo recordar que somos unos pequeños seres vivos en un universo inmenso.
“Fin del Cañón del Sumidero, inicio de la presa hidráulica y paso del Río Grijalva”
2. Lago Tziscao
Dentro del Parque Nacional Lagunas de Montebello, se encuentra el Lago Tziscao que es uno de los más grandes, este lago pudimos observarlo desde un mirador y la vista es impresionante pues su agua tiene esa degradación de colores desde un verde intenso hasta un verde esmeralda en las orillas, además después del lago y a lo lejos se puede ver un pequeño pueblo llamado Chuj que está entre la frontera de México con Guatemala, separándonos únicamente unas montañas.
“Al fondo se alcanza a ver el pueblo Chuj”
Estar en este mirador con una vista hacia el lago, al pueblo y rodeado de montañas hace que no te quieras ir para seguir contemplando este paisaje, lamentablemente no había manera de bajar hasta el lago así que solo nos quedamos un rato a observarlo. Por la zona boscosa en la que se encuentra el mirador había llovizna pero era tan ligera que hasta lo disfrutaba.
3. Lago Pojoj
Si llegas a un lago que con solo verlo te cautiva pero además tienes la oportunidad de recorrerlo sobre una balsa a la cual nunca te has subido y sobre todo puedes nadar en él, créeme que no perderías para nada la oportunidad de hacer todo esto, así me sentí al ver y al escuchar todo lo que se podía hacer en el Lago Pojoj, desde su pequeño mirador se puede apreciar esta belleza pero mientras iba bajando por los escalones para llegar a la orilla me sentía entrando al pleno paraíso y justo ahí te esperan unas personas para invitarte a dar un recorrido en las balsas hechas de tronco.
En medio del lago hay una pequeña isla donde llegan las balsas ahí se puede nadar, además de que cuenta con un pequeño vivero donde se siembran y se dan las orquídeas de varios colores: blancas, rojas, amarillas, moradas, azules y algunas con manchitas de colores, son flores tan hermosas que se dan mayormente en Chiapas, pero esto no es todo pues solo imagínate estar parado sobre una isla rodeado de agua, montañas y bosque, diría que es el mejor lugar del mundo para olvidarte de lo externo.
Además otra de las cosas que pude experimentar estando en esta pequeña isla es que se puede gritar hacia las montañas y así lo hicimos, gritamos con todas las fuerzas para escuchar el eco de nuestra propia voz como corren por las montañas, es una experiencia única y volvería a este lugar una y otra vez.
4. Lago La Cañada
Si necesitas inspiración o simplemente amas contemplar un paisaje, este es el lugar perfecto para hacerlo. De los 2 miradores que visitamos este fue el mejor para mí, desde que vi el Lago La Cañada lo amé.
“Vista desde el mirador: Lago La Cañada”
Al llegar al mirador el día estaba un poco nublado pero eso realmente no importaba porque su vista te cautiva al instante, después de estar un rato observando este paisaje de repente salió el sol haciendo su propio espectáculo sobre el paisaje pues mientras el atardecer caía los rayos del sol se reflejaban en las montañas y sobre el agua, haciendo que esas tonalidades verdes del bosque en las montañas resalten su color y el lago se convierta en un enorme espejo para ellas, anexando a esto el color azul del cielo, fue el más bello de los escenarios que la naturaleza me regalo, sin duda es algo que me llevo en la memoria y en el corazón. Creo que solo un viajero que disfruta de la naturaleza podría entender esto.
5. Lagunas de Montebello
Al llegar a Laguna de Montebello me sorprendí con tanta belleza, en la entrada hay unos pequeños restaurantes y locales donde venden artesanías como unas pequeñas cabañas sobre la playa, su arena es algo gruesa con un color café, el lago enorme y todo rodeado de bosque, mientras estás aquí unas niñas pequeñas se acercaron a cantar un poema y era algo así: “olas que vienen, olas que van, hola mi amor cómo te va…” era tan hermoso escucharlas recitar un poema aunque al final te piden propina 🙂 pero la verdad es que si vale la pena dárselos.
Desde aquí se pueden conocer otros 2 cenotes pero primero te tienen que llevar en una lancha para cruzar la laguna y de ahí caminar unos cuantos kilómetros a caballo, como nuestro tiempo estaba apresurado no tuvimos tiempo de hacer esta actividad extra 🙁 pero volveré para hacerlo.
6. Agua Azul
Mi viaje fue a mediados de octubre y para serte sincera Agua Azul en estas fechas no se ve con el color azul turquesa que se espera, esto debido a la temporada de lluvias que apenas terminaba pero aun así nada impidió disfrutar de sus numerosas cascadas en forma de escalones, el agua se veía entre un color chocolatoso y apenas empezando a tomar su tono azulado pero solo en algunas partes se notaba. El ruido de las cascadas y la brisa pegándote al rostro, más el paisaje que te rodea es como una invitación para entrar al paraíso y solo concentrarte en admirar lo que ves.
Desde que llegas a Agua Azul se pueden ver las cascadas pero mientras vas caminando te vas acercando más a ellas, para llegar hasta lo más alto o casi donde inician las cascadas en forma de escalones se tiene que subir más de 100 escaleras que durante todo el camino puedes encontrar vendedores ofreciendo variedad de artesanías, mini tienditas, pequeños restaurantes de comida, miradores, sillas para disfrutar de estas majestuosas cascadas y hasta baños públicos. Además si llegas hasta casi lo último del camino te espera la entrada a una zona de árboles como si fuera un enorme patio y una alberca natural que es el río en su zona más tranquila.
7. Misol Há
De todas las cascadas que pude visitar en Chiapas, Misol Há fue la única con la que pude tener más contacto ya que aquí además de que puedes observarlo desde su mirador en la parte de arriba, puedes bajar a las orillas del pequeño lago que se forma y nadar con algunas precauciones que te indican como “no nadar descalza ya que las rocas son muy filosas y resbalan rápido”, pero lo más interesante y divertido de este lugar es que también puedes pasar por detrás de la cascada donde te mojas completamente con la brisa.
Créeme que no te la pasarás nada mal, ya que además cuenta con un restaurante donde pudimos comer muy rico, aquí, ofrecen platillos deliciosos que van desde un consomé de pollo hasta especialidades en pescado, los platillos tienen un costo adicional pero realmente no son caros. Igual dispone de algunas cabañas donde puedes quedarte para disfrutar de la naturaleza por la noche que es otra experiencia para vivir y aunque nosotros no optamos por esta opción me queda claro que sea de día o de noche siempre hay mucho por disfrutar.
8. Cascadas el Chiflón
Llamada así porque en algunos periodos del año cuando hay viento fuerte se puede escuchar como las Cascadas el Chiflón silban y el sonido corre por las montañas, esto fue una de las explicaciones que nos dieron al llegar aquí, como también el comienzo de una gran aventura.
Para iniciar el recorrido nos indicaron que sería algo largo y cansado pues teníamos que subir más de 400 escalones para llegar a la última cascada llamada Velo de Novia, así que nos mentalizamos y empezamos el recorrido con ayuda de un guía, caminando unos metros hacia dentro se empieza a ver el paso de un río, del otro lado hay unas pequeñas cabañas, parrillas, sillas y mesas para pasar el día con los amigos o en familia, incluso se puede acampar aquí.
Continuando con el recorrido y poniéndose cada que vez mejor las primeras cascadas se podían ver desde los diferentes miradores donde podías tomarte las fotos que quisieras mientras la brisa te empapaba poco a poco, alguna de ellas y teniendo nombres por la forma que toman son: El Suspiro, Ala de Ángel, Arcoíris, La Quinceañera y Velo de Novia.
“Cascada el Suspiro”
“Cascada Ala de Ángel, fotografía de Eduardo Robles”
A mitad del camino teníamos la opción de hacer tirolesa pasando sobre estas preciosas cascadas, pero solo se podía hacer al regreso ya que aún nos esperaba lo mejor pues al final se encuentra una de las mejores cascadas con una caída de aproximadamente 70mts y es la Cascada Velo de Novia literalmente lo parece aunque también se conoce como La Quinceañera, además que con la experiencia del guía nos hizo realizar una actividad diciéndonos que nos quedáramos viendo únicamente la parte más alta de la cascada durante 10 segundos y después voltear a ver la montaña ¿Qué fue lo que pasó? Una ilusión óptica, pues parece que las montañas se estuvieran moviendo en lugar del agua que corre ¡Es fantástico!
“Cascada Velo de Novia y Quinceañera”
Siendo la última cascada y el fin del recorrido había la opción de hacer tirolesa, solo de imaginar que te lanzarás pasando sobre un río y que a tu izquierda se encuentra la enorme cascada, es algo que llena tu cuerpo de adrenalina y al mismo tiempo de miedo pero que solo lo superas al entender que es tu única oportunidad para disfrutar desde otra manera la belleza de esta cascada.
9. Caminata por la Selva Lacandona
“Fotografía de Paulo Carbajal”
Aunque sé que hay muchos más paraísos por conocer en Chiapas, solo tuve la oportunidad de visitar 9 de sus bellezas naturales y el último fue la caminata en una parte de la Selva Lacandona ya que es inmensa para recorrerla.
Para empezar la caminata por la Selva Lacandona antes tuvimos que ponernos repelente porque aquí es el lugar favorito de los mosquitos, una vez listos y con ayuda de un guía emprendimos la caminata, a pocos metros se encontraba el Árbol de La Vida lo que nos explicaba el guía que así le decían los antiguos mayas al Árbol de ceiba ya que para ellos representaba los 3 niveles de la vida: el cielo, sus ramas; el tronco, el mundo en el que estamos los vivos; y las raíces, el inframundo donde nos vamos al morir, creyendo que todo se conecta para hacer una sola comunicación entre los 3 niveles. Además nos dijo que si abrazábamos el árbol un rato éste nos transmitiría sus energías y más años de vida.
Así, seguimos la caminata y pudimos observar algunos vestigios mayas, ruinas que aún no han sido exploradas en su totalidad; pequeños estanques de agua que se formaban por las lluvias y la humedad de la selva, aunque no pudimos observar ninguna especie de animal porque no nos adentramos demasiado si podíamos escuchar el cantar de las aves que se encontraban en la cima de los enormes árboles que nos rodeaban.
“Vestigio Maya, aún no explorada en su totalidad”
Estar aquí y caminando en esta enorme selva, es una experiencia diferente pues tienes que tener condición y valentía para subir, bajar, caminar entre lodo algunas veces, soportar que los mosquitos te piquen aun teniendo repelente, sudar, ensuciarte un poco y hasta rasparte con alguna rama en el camino. Eso sí, nada es igual después de salir de la selva pues haciendo a un lado el cansancio, los piquetes y todos esos obstáculos que hay en el recorrido, la sensación y el sentimiento de haber tenido pleno contacto con la naturaleza hace que deseches lo malo y te envuelvas con la más pura energía de la naturaleza.
Información sobre Tours por Chiapas
Lugares por ver en Chiapas hay demasiados, como decía al inicio tanto zonas naturales, como las ciudades, poblados, zonas arqueológicas y demás son algunos de los cientos por visitar, por ahora solo algunas de sus bellezas naturales pude conocer pero es seguro que regreso aquí para ver más de sus encantos. Así que si estás planeando tu siguiente viaje, anímate y ve a conocer Chiapas estoy casi segura que al final no querrás regresar a casa 😉 Mi recomendación es que hagas tu viaje entre los meses de enero a mayo que es cuando se puede disfrutar de los ríos y cascadas mucho mejor, además que en estos meses ese tono azulado que vemos en fotografías se puede apreciar muy bien.
